Cada 21 de mayo, los amantes del té de todo el mundo celebran su infusión favorita en el día internacional del té. Esta fecha especial no solo rinde homenaje a una bebida milenaria, sino que también nos recuerda la riqueza histórica, la diversidad cultural y las innovaciones comerciales que han surgido en torno al té. Así que si quieres conocer más sobre esta deliciosa bebida, sigue leyendo este blog.
Origen del día internacional del té
El día internacional del té, tal como lo conocemos hoy, es relativamente reciente. Desde 2020, se conmemora cada año el 21 de mayo, fecha proclamada oficialmente por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2019, pero…¿por qué dedicar un día al té?. Pues esta iniciativa de la ONU busca reconocer la importancia cultural y económica del té a nivel mundial, así como promover su producción y consumo de forma sostenible. En particular, se enfatiza el apoyo a los pequeños productores y trabajadores del té, muchos de ellos en países en desarrollo, y se busca incentivar una mayor demanda de esta infusión en los países productores con bajo consumo per cápita.
Curiosamente, la celebración internacional del té tiene raíces anteriores a la ONU. Antes de unificarse la fecha en mayo, varios países alrededor del mundo ya festejaban el día del té el 15 de diciembre de cada año. Este festejo comenzó en 2005, impulsado por lugares como China, India, Turquía, Japón, entre otros. Pero con el tiempo, la conmemoración logró reconocimiento global hasta que finalmente la ONU estableció el 21 de mayo para coincidir con la temporada de cosecha en muchos países productores, destacando la relevancia del té para las comunidades rurales.
Historia y evolución del consumo de té a nivel mundial
Hablar de té es hacer un viaje en el tiempo. La historia del consumo de té se remonta a miles de años atrás en el este de Asia, de hecho, existe una famosa leyenda china que atribuye el descubrimiento del té al emperador Shen Nung alrededor del año 2737 a.C. Esta leyenda cuenta que mientras el emperador hervía agua bajo la sombra de un árbol silvestre, algunas hojas del árbol cayeron accidentalmente en la olla de agua y el emperador probó la infusión resultante y quedó reconfortado por su sabor y efectos, marcando así el origen del té como bebida. Desde entonces, esta infusión de la planta Camellia sinensis comenzó a ganar prestigio. Además, en la antigua China, el té fue no solo una bebida medicinal y refrescante, sino también un artículo de lujo que llegó a usarse como moneda de cambio debido a su alto valor y con el tiempo, la preparación del té se convirtió en un arte refinado, así que se desarrollaron ceremonias, se fabricaron elegantes juegos de té en porcelana y la bebida se integró en la vida cotidiana y espiritual de la gente.
Del corazón de China, el té emprendió ruta hacia el resto del mundo, por lo que la expansión del té a otros continentes ocurrió gradualmente a través de viajeros, monjes y comerciantes y hacia el siglo VIII, los monjes budistas ya habían introducido las semillas de té en Japón, dando pie a la tradición japonesa del té. Con el tiempo, el té fue llegando a muchos más lugares hasta conquistar a todo el mundo.
El impacto cultural del té
Una de las grandezas del té es cómo se adapta y adopta en diferentes culturas, dando lugar a tradiciones muy variadas alrededor del mundo. Algunos ejemplos de la huella cultural del té son:
- Asia: En China, esta infusión es mucho más que una bebida, es parte de la identidad nacional. Desde tiempos antiguos, servir té es símbolo de respeto y hospitalidad. Además, China también nos ha regalado la inmensa variedad de tés que disfrutamos hoy, como por ejemplo, el té verde, el té negro, el té oolong, el té blanco y el té rojo.
En Japón, el té verde, particularmente en forma de matcha, se convirtió en el centro de una de las prácticas culturales más refinadas: la ceremonia japonesa del té o chanoyu. Este rito, influido fuertemente por la filosofía zen, transforma el simple acto de preparar y beber té en una experiencia espiritual. La ceremonia japonesa del té, busca encarnar cuatro principios fundamentales: la armonía, el respeto, la pureza y la tranquilidad, por lo que participar de esta ceremonia es sumergirse en un ambiente de silencio y contemplación, donde el anfitrión e invitados comparten no solo el té, sino un momento de profunda conexión humana. - Reino Unido: Pocas costumbres son tan sinónimo de cultura británica como la hora del té. En el Reino Unido, tomar el té de la tarde se convirtió en un evento social. Esta tradición nació en la época victoriana gracias a la duquesa Anna de Bedford, quien popularizó el tentempié vespertino para calmar el hambre entre el almuerzo y la cena. Con el tiempo, la hora del té se volvió un ritual elegante y relajado, además de ser una oportunidad de conversar y disfrutar de la repostería junto con una delicioso té.
- India: En India, el té adoptó una forma muy propia: el famoso chai o masala chai. Si viajas por el país, es imposible no percibir el aroma dulce y especiado del chai que se cuece a fuego lento en cada esquina. A diferencia del té británico, que suele infusionar brevemente, el chai indio tradicional se hierve junto con leche, azúcar y especias como canela, cardamomo, jengibre, clavo y pimienta negra, creando una bebida intensa y reconfortante.
Nuevas tendencias en el mundo del té
Con una historia tan rica, cabría pensar que ya nada nuevo podría decirse sobre el té, pero la creatividad humana siempre encuentra formas de reinventar lo clásico. En las últimas décadas ha emergido una nueva tendencia global en el consumo de té: el famoso bubble tea. Esta divertida bebida originaria de Taiwán, combina lo mejor de la tradición con la innovación culinaria, y ha logrado conquistar paladares en todo el mundo.
El bubble tea nació, según cuenta la leyenda, cuando a un vendedor de té local se le ocurrió añadir bolitas de tapioca a su té, creando una bebida con una textura inesperada. Aquellas bolitas negras y masticables que reposaban en el fondo del vaso como “burbujas”, añadían un toque divertido a la experiencia de beber té, lo que tuvo por resultado que esta bebida fuera todo un éxito y ganara popularidad rápidamente.
Como ejemplo de cómo el bubble tea ha sido adoptado e innovado fuera de Asia, podemos ver lo que ha hecho Cassava Roots, la marca pionera que ha revolucionado la experiencia del té con tapioca en México.
Fundada por Patricio y Daniela Lombardo, Cassava Roots se ha consolidado como la franquicia de té con tapioca número 1 en México, ya que lejos de ser solo una copia de las casas de té asiáticas, Cassava Roots le dió al bubble tea un sello mexicano y urbano muy particular, por lo que la experiencia en Cassava Roots va más allá del paladar, involucrando todos los sentidos en un entorno único.
El té, con su inmenso recorrido histórico y cultural, se mantiene vigente en nuestras vidas y continúa evolucionando. En el día internacional del té, celebramos esa dualidad maravillosa entre la tradición y la innovación, así que te invitamos a unirte a esta celebración global del té y qué mejor manera de hacerlo que aventurándote a probar el mejor bubble tea de México en Cassava Roots.